Como resultado del ensayo clínico de neutralización viral del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK) se demostró que las vacunas anti-COVID-19 Abdala y Soberana actúan efectivamente contra la variante ómicron del virus SARS-CoV-2.

 

Las pruebas evidencias que el 90% o más de los vacunados con Abdala y Soberana 02 presentan seroconversión de anticuerpos a ómicron (la seroconversión es la transición del punto de la infección viral a cuando los anticuerpos del virus llegan a estar presentes en sangre). En el caso de quienes estaban reforzados con Soberana 01 y Abdala, el 100% mostró seroconversión de anticuerpos a ómicron.

Gracias a la acción de las vacunas cubanas y la implementación de medidas sanitarias que han sido quitadas en otras latitudes, la enfermedad en la isla se ha comportado de un modo diferente al resto del mundo. La tasa de recuperación es superior al 97,5%, la letalidad acumulada (de 0,82 y de 0,14 en las últimas semanas) está muy por debajo de las cifras de países seleccionados para el análisis, al tiempo que la tasa acumulada de fallecidos por millón es muy inferior a la de las naciones de Europa y las Américas.

Los niños menores de dos años, no vacunados, presentan un riesgo 2,5 veces mayor de enfermar con relación a los que tienen entre dos y 18 años y un riego dos veces mayor con respecto a la población en general. Garantizar su protección depende del cumplimiento de las medidas de higiene y se exhorta a las familias a que las cumplan de forma responsable. 

 

Fuente: Biocubafarma